Lo que les quiero contar hoy, inspirada en el ultimo blog de
mi amiga querida +Rocio Orosco La Vera, es mi gran aventura…el convertirme en mama.
Estaba a 1 día de cumplir 35 semanas, había tenido un
embarazo maravilloso (a excepción de las nauseas de los primeros meses, la
acidez de los siguientes meses y el no poder dormir de los últimos meses), no
sufrí de la presión, no tenia placenta previa, no había cordón enredado, la
bebita se había acomodado perfectamente para un maravilloso parto natural, sin
epidural, tal como yo lo soñaba. Quería sufrir los dolores de las
contracciones, quería gritar, maldecir a mi marido, quería escuchar al medico
decir: ya tienes 10 de dilatación, vamos a la sala de parto y en ese momento
quería pujar y pujar y sufrir y sufrir hasta que saliera mi bebita y sentir
toda la emoción de al fin conocerla, abrazarla y contemplarla y que mi esposo
querido (en ese momento ya no lo odiaría, mas bien lo amaría mas) me besara en
la frente, así como en las películas y lloraríamos juntos de tanto amor y
arcoíris y mariposas de colores….. pero NO, todo fue muy diferente…
Esa noche/madrugada tuve contracciones no dolorosas pero si
muy seguidas y duraderas….era extraño porque solo tenia 35 semanas y según yo
aun tenia por lo menos unas 3 semanas mas para hacer todo lo que me faltaba.
Espere ansiosa las 7 am para poder llamar a mi doctor y cuando
lo hice me dijo que vaya inmediatamente a la clínica al área de amenaza de parto,
así que lo hice.
Llegue con mi mami un viernes 13 de mayo (Día que la Virgen
María bajo de los cielos a Cova de Iria) y me hicieron el protocolo de amenaza
de parto… yo solo pensaba: nacerá hoy? La conoceré hoy? Ay noooo, pobrecita,
esta muy chiquita… Bueno, luego de todo, el doctor decidió internarme porque
las contracciones no paraban y el consideraba que aun no era momento de “que
salga”, asi que me quede con una droga intravenosa que supuestamente bajaba las
contracciones, pero no, entre broma y broma decíamos: ay jaja! Esta desesperada
por salir a conocernos jiji jaja, sin darnos cuenta de la gravedad del asunto… después
de 2 días de intentar bajar las contracciones, se les ocurrió hacerme una ecografía
para ver como estaba de liquido y ya pues! Eso era! Había perdido
todititititito el liquido y no me había dado cuenta…como??? No se! Osea, ahora si
se, pero solo diré que eran fugas que yo pensé que eran pichitas…
El domingo a las 11 am luego de quitarme mi chocolate de
la mano y el catéter de mi vena y de indicarme que no coma nada, se acerco mi
esposo con cara de autogol a decirme que me harían una cesarea de emergencia,
ya que tenia una infección muy fuerte y eso sumado a la falta de liquido ponía en
riesgo a nuestra hija…… Yo lo único que podía pensar (bien idiota yo) eran 3
cosas, no, 4 cosas:
1-
Maldito carpintero, aun no me entrega la cómoda
y tengo la ropita en bolsas de metro!
2-
No traje camaraaaaaa
3-
No me compre pijama bonita, odio las batas de
las clínicas
4- +Viviana Ledesma esta en Cajamarcaaaaa buaaaaaa
Luego de pensar todas esas idioteces me detuve a pensar en
mi bebe, que al fin la conocería, la cargaría, la besaría, vería su carita y arcoíris
y mariposas de colores pero NO, de nuevo NO.
Me dijeron que abrace mis piernas….eso era imposible
considerando que había subido 18 casi 19 kilos y mi barriga parecía de
trillizos… hice el intento y me pusieron la epidural a la que le tenia mucho
miedo pero no me dolió nadita, casi ni la sentí. Cuando hizo efecto empezaron “el
procedimiento” y mi esposo (mi po) filmaba con mucha emoción. Yo solo sentía que
saltaban encima de mi barrigota y mucha presión, hasta que escuche: INGAAAAAAA.
Llore! Me emocione, quería verla y no podía por la cortina que me pusieron, el
po grito: es igualita a ti!!! la vi, nos tomaron foto familiar, pero no me
acuerdo ni un poquito de ese momento. Se la llevaron y a mi me llevaron a sala
de recuperación. No se cuanto tiempo paso, pero en ese momento me olvide de los
4 puntos de arriba y solo pensaba: Ojala mi bebita este bien.
Salí de sala de recuperación y vi a mi po y a mi cuñada
todos contentos recibiéndome y yo pregunte: a que hora la traen? Po me dijo: no
hables que te vas a llenar de peditos.
Llegando al cuarto estaba casi toda mi familia y la de mi
po, y volví a preguntar, pero esta vez por escrito, para no llenarme de peditos.
Luego que todos se fueron mi po me explico que bebita estaba
en cuidados intensivos, que al parecer tenia septicemia y la tenían en observación
y que definitivamente no la iba a poder ver ese día. Se me vino el mundo abajo
y quería hablar con el neonatólogo quien nos dio cierta tranquilidad, nos dijo
que estaba estable, pero que se tenia que quedar en UCI por lo menos 5 días.
Esa noche fue muy duro escuchar los llantos de todos los bebitos recién nacidos
y yo ni siquiera conocía a mi bebe, mas que en los videos que me enseño mi po.
Al día siguiente me llevaron a conocerla, solo podía verla,
no tocarla, porque estaba en una incubadora con una catéter intravenoso.
Recuerdo que la vi y observe todos sus detalles, solo tenia puesto su pañal y
un gorrito lila, tenia pelitos negros en la espalda, dije: es peluda como su
padre (esos pelitos se caen las ultimas semanas del embarazo, pero ella no
llego, así que salió peluda), no tenia cejas, no tenia pestañas, tenia el
pelito oscuro delgadito, no estaba segura si era lacio u ondulado, tenia el
obligo salido y tenia una arruga en la frente igualita a la mia. Bostezo y siguió
durmiendo. La ame, la ame con todo mi corazón, quería que pasen los días para
poder llevarmela.
Paso exactamente 1 semana antes de que salga de la clínica,
pero no hubo día que no fuéramos a verla. Ese día fuimos muy emocionados, entré
a la sala y ayude a la enfermera a vestirla y luego le di los aretes para que
se los ponga, sino iban a pensar que era machito! Y luego de ponerle los aretes
me la entregaron. ESE fue mi momento de arcoíris y mariposas de colores. Y ese fue el inicio de mi vida como mamá.